Recuerdo a mi aubelita diciéndonos aquello de "Si quieres que te cuente el cuento de la buena pipa"

Pues cuento o parábola y desgraciadamente sin fumar para trasegarlo de una buena bocanada de aire puro.... Medio año de escribir por aquí, blogger, aunque lleva una más de un año haciéndolo, nos ha merecido la siguiente y magnífica recompensa crematística, luego se diga que las buenas artes no saben apreciarse, de 13 euros. 13 euros por publicidad en nuestros cinco diarios. Que si por la publicidad no fuese, pues nada de nada, vacío económico al que tan acostumbradita me tiene mi toda existencia.
Un brindis por las noveluchas y cuantos fraudes literarios o de libros de divulgación, pseudohistórica pseudocientífica, géneros de los actuales bestsellers. Ellos sí cobran, otra cosa es que valgan. Me refiero a que sirvan de algo, sirva para algo todo ese río de tinta, página impresa, ruina de los bosques, muerte del planeta.
Sólo conozco un género de libros que sí se merecen los árboles que se les sacrifican: ESOS LIBROS QUE SE PUBLICARON TAN TARDE COMO PARA QUE NI SIQUIERA LOS CONTEMPLASE LA VIDA DE SU AUTOR, EJ. ALEJANDRA PIZARNIK QUE GANÓ MÁS QUE UNA, PUES SE GANÓ UN PAR DE PREMIOS. PERO QUE PARA EL CASO, LA MURIERON DE HAMBRE, OTRO SUICIDIOASESINATO MÁS DEL MUNDO DE LAS LETRAS. 5O SECONALES QUE SE TOMÓ SÓLO PARA RECORDARSE QUE ESA ERA SU ÚNICA SALIDA... LA GENTE QUE ESCRIBE BIEN SUELE NO TENER MUY BUENA MEMORIA, AUNQUE RECORDEMOS TANTÍSIMO DE LO QUE TAMBIÉN DEBERÍAMOS OLVIDARNOS.
Memoria viuda, luto en mi recuerdo.