domingo, 5 de abril de 2009

Sobre el amor hay que hacerlo, que nos cuentan los que escriben desde el gremio de lo psicoanalítico

Esa psiquiatría, psicología, la sociedad delegando en ella desde que se puso en pie de existencia tratar a locos como enfermos, no a pedradas, aunque peor que si a pedradas; esa psiquiatría, psicología, que jamás pagará, al igual que la Iglesia, y tantas otras instituciones estatales o paraestatales, por sus cuantiosos crímenes: considerar la homosexualidad como enfermedad, o considerar que desde ese patio sucio que son psicología, psiquiatría, se pueda ayudar y menos a las víctimas que la sociedad decida exterminar en el tiempo que sea utilizando para ello todos los métodos o instituciones, científicas o no, a su alcance.

Las palabras que siguen, a una profesional de ese medio-mierda al que aludíamos, psicoanálisis por el autor del ano como la máxima expresión del alma humana y su sexualidad (aunque para nada nos contó sus "anos" íntimos intentando poner "ano" en cuanta rosa homosexual cayó en sus garras, no de pedófilo, ¡¿o sí?!, escatológicas) creado.


Dice la psico-analista (bien está separar aunque sea con un guión ambos términos que jamás hubieran debido conjugarse juntos, analismo anal y la psíquica alma): Que el amor debe hacerse. Ya saben el lugar común. Y yo le respondo, ni a sus oídos llegaría:

¿Y a qué lo escribes? (ella poematizaba del amor o los amores que se hacen; o dejan de hacerse si es que se escriben, digo yo) Y el Verso se hizo Coito, o el Coito Verso... Y habitó entre nosotros.
Se hace con pluma, con tirantes, tirabuzones, pene-vagina, vagina a secas (lo malo es que fuere "vagina seca"; pero ¿qué remedio? Vaginesil. Hasta la tele lo hace: Verso-Sexo, Versus-Escribo, Versus-Miami-Versace) ¡Puta madre lo escrito! ¿O está prohibido decir "puta madre", sea un taco sin tacones ni sexus, ni nexus, ni versus-versace, y no está prohibido versar sobre el sexo, si dícese verso, novela, versiones...incluso con pluma recién del armario sacada, digo del plumero? ¡Qué injusticia!

Sépase que todo nació del taco, que, por cierto, jamás usó tacones; no es que no le dejaran al taco usarlos, es que no se dejaron usarlos, ellas a sí mismas no se lo permitieron, las de los tacones -en verso o en prosa- Todo lenguaje nacido de su madre rudeza natura, ¿y ahora es contranatura usarlos, sólo Cela tuvo derechos, de tantos tacones y tantos tacos que le lamieron el culo, y le lamen, a lo ancho de la estúpida geografía del idioma?
Esta que margináis, queridos, queridas, ¿por usarse de tacos no tacones, tampoco siempre, de vez en cuando, por usarse de esas lesbianas plumas que no se casan ni con los armarios, no los plumeros, ni fregaderos, ni otras consultas profesionales, que las contienen... o expulsan?

Habito entre vosotr@s, más que os pese... Más me pesa a mí. Y además comento.

"Dulce cuando dulce y sexo cuando sexo"... ("Verso" de la exquisita profesional del psicoanálisis)
Adivinanza. ¡¿Puede ser una flauta afinada a palillo de tambor?! ...¿O Bartolo tenía una flauta con un agujero solo y Fermina gabardina pues el babas que soplaba, sólo babas? ¡Melodía!, Afinador. Para escribir poesía, POESIS, de la sin i acentuada y con mayúsculas, hay que salirse del psicoanálisis: esa estafa. Un psicoanálisis que siempre vio culos en todo o confundió a las mujeres con sombreros, pues el pene se lo demandaba, el pene mal empleado en vagina cuando se ensoñaba anos vírgenes, cual Freud mientras dormitaba en sus consultas o arrojaba por las escaleras de su piso a las mujeres de los "amigos" a los que no se atrevía a llamar o conocer por sus verdaderos nombres de "amados"... fuese analmente. Lo de asnalmente sólo lo dejaba cuando mutilaba mentalmente a toda mujer (también varón) que por sus manos pasaba, no sólo el famoso caso de la lesbiana, que hubiese dado para una novela romántica de no haberlo torpedeado él... o pedorreado. Aunque así hablan muchos aspirantes a Parnasos que hacen psico-anal-ogía creyéndose que literatura, al contrario de lo que dijo Papini con ironía de Freud: "Ese que convirtió la ciencia en literatura"... Y además barata. Termino yo de ironizar por Papini.
"La rebelión es mirar una rosa hasta pulverizarse los ojos" Alejandra Pizarnik-en esta vida

"Solo veo rosas" Alejandra Pizarnik-más allá de esta vida-

Solo soy pura rebelión, vino a decir... aunque no sola estás

Vos no está sola. Y esta rebelión se hará. Y no desde la soledad. No desde cuatro gatos somos y por eso nos pisotean. ¡Una ola de Rebelión vendrá que tambaleará los cimientos podridos de estas sociedades!




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